Parece como si todo se fuese a estrenar de nuevo; todo rebosa de su pureza esencial y a la vez ese nuevo comienzo de vida, después de un retiro, de una época especial en la vida, de unos Ejercicios... nos debe llevar a cosas concretas que nos ayudarán a alimentar nuestro espíritu.
Cabría peguntarnos ¿Cómo alimentar el espíritu para que ese comienzo no quede en nada?
Podemos intentar un hacer más lento,
no hablar innecesariamente,
apagar el móvil,
no reprochar a los demás,
no criticar,
no quejarse de lo que ocurre,
no justificarse,
orar sin muchas ganas, ...
y otro sin fin de pequeñas cosas,
pequeños detalles que ayudan en el día a día.
Se trata de ser fieles al Espiritu y Él nos indicará el camino a seguir y podamos continuar gozando de la magia de los nuevos comienzos, porque cada día será nuevo.
Ideas sacadas de charlas del Hno. Mario.
Comentarios